La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado en repetidas oportunidades la importancia de crear hábitos de vida saludable para los niños. De acuerdo con un estudio elaborado por el organismo, aumentar la actividad física, reducir el sedentarismo y garantizar un sueño de calidad, especialmente en los menores de 5 años, ayudará a prevenir enfermedades como la obesidad infantil y permitirá mejorar su salud mental.
Llevar una dieta sana avalada por un experto es ideal para evitar la desnutrición y trastornos en los infantes. Igualmente, la OMS enfatiza que una nutrición óptima impulsa un crecimiento sano y contribuye a un mejor desarrollo cognitivo.