El servicio de alumbrado público forma parte de los servicios públicos locales que cada municipio debe brindar en su territorio, con el fin de hacerlo más utilizable y seguro para la población.
Los sistemas de alumbrado público consisten principalmente en sistemas de alumbrado público, que se pueden configurar de diferentes tipos: desde los más tradicionales (faros, equipos de pared…) hasta los más modernos y de bajo impacto.
La evolución técnica de los sistemas de alumbrado público estuvo dictada por la necesidad de los Municipios de cubrir dos necesidades: la de contener el consumo energético y la de reducir la contaminación lumínica.
Las soluciones técnicas más innovadoras pasan por el uso de cuerpos de iluminación con fuentes LED y su telegestión gracias al telemando. Esta tecnología, llamada Smart Lighting, hace que la gestión de la planta sea más eficiente e innovadora, permitiéndole:
- Reducir el consumo de energía en aproximadamente un 65%, lo que también permite un ahorro de energía adicional del 20% al modular el flujo luminoso de acuerdo con las necesidades reales del tráfico vehicular.
- Gestione las plantas de forma más eficaz gracias a una vida útil más larga y una menor necesidad de mano de obra.
- Mejorando la calidad de la luz gracias a la alta reproducción cromática de las nuevas fuentes que garantizan una percepción óptima del color.