A nivel mundial, el sector del transporte desempeña un rol fundamental en el desarrollo socioeconómico de los países y en la lucha contra el cambio climático, siendo el segundo mayor emisor de CO2e derivado de la quema de combustible. En respuesta a esta problemática, diversas naciones han adoptado medidas para revertir esta tendencia, desarrollando diversos Planes de Descarbonización que incluyen la integración de vehículos eléctricos en la flota de transporte público.
En este sentido, Chile es uno de los países que se destacan a nivel mundial gracias a la implementación de diversas estrategias de descarbonización y la puesta en marcha del Plan Nacional de Electromovilidad, que tiene como objetivo lograr que el 100% del transporte público sea eléctrico para el año 2030.